El fin de semana me di a la tarea de hacer este cheesecake vasco, que es una receta facilísima, e imposible de fallar. Este cheesecake a diferencia de otros, es sin corteza y tiene un terminado desordenado y quemado que, provee sabores caramelizados y una corteza “natural”. Y lo mejor de todo es, que no hace falta enfriar todo un día para comerlo.

Esta receta es una receta adaptada, de la receta adaptada de Joshua Weissman, quien originalmente la adaptó de un restaurante llamado La Viña. Los valores de sustitución que se encuentran abajo son los que usa Joshua Weissman en su receta AQUI.

Tips antes de empezar

Necesitarás un molde desmontable para que puedas sacar el cheesecake una vez horneado. Lo ideal es envolverlo con doble hoja de papel para hornear ya que dentro del horno esponjará muchísimo. En la imagen debajo te muestro como se ve el molde antes de meterlo al horno.

Una vez con todos los ingredientes, 30 minutos antes de hacer esta receta saca el queso crema del refrigerador, esto ayudará a que tu cheesecake quede suave y sin grumos y a menos tiempo de batido.

Por otro lado, una vez que saques el cheesecake del horno notarás que habrá esponjado muchísimo, pero mientras enfría comenzará a bajar. Y eso es completamente normal, solo espera a que haya bajado completamente y esté a temperatura ambiente antes de partirlo.

Reemplazar ingredientes

En algunas ocasiones, nos falta uno u otro ingrediente para elaborar una receta por ello, aquí te dejo algunos equivalentes para reemplazar ingredientes en esta receta por otros similares sólo hay que tomar en cuenta que al cambiarlos cambiará su aporte calórico pero al final quedarán igual de ricas 🙂

Reemplaza esto:	Por esto:
140gr endulzante sin calorías: Monk fruit o Xylitol	280gr azúcar blanca
55gr harina almendra	55gr harina blanca (no uses integral)

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